viernes 11 de octubre de 2024 - Edición Nº437

Ayuntamientos

Las Palmas de GC

Las Palmas de Gran Canaria cambia de aires con la creación de una Zona de Bajas Emisiones en Las Alcaravaneras

La ZBE proyectada comprende una superficie de 62.170 m2 y tiene una población de 13.574 personas, 2 colegios y 127 locales


por Politican


El concejal de Movilidad del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, José Eduardo Ramírez, presentó este pasado viernes las características generales de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) que se implantará, a lo largo de los próximos meses, en el barrio de Las Alcaravaneras.

 
“Este proyecto tiene como objetivo la reducción de la contaminación generada por el tráfico rodado en las calles de nuestro municipio, así como la recuperación del espacio público para generar entornos más amables, seguros y accesibles para el uso y el disfrute de toda la ciudadanía”, detalló Ramírez.

 
“Así, Las Alcaravaneras se convertirá en el primer barrio de la capital en contar con una Zona de Bajas Emisiones, una iniciativa que desarrollaremos a través de Sagulpa y que tiene como fin último la mejora de la calidad de vida de los vecinos y vecinas de esta zona, que contarán con más espacios verdes y de esparcimiento”, explicó el concejal.


El establecimiento de las Zonas de Bajas Emisiones se basa en tres ejes principales: por un lado, el proceso normativo, que ya cuenta con ordenanza redactada y en tramitación interna en el Ayuntamiento; por otro, el tecnológico, que liderará Sagulpa y cuyos proyectos ya se encuentran en fase de contratación; y, por último, el de la señalización y actuación de urbanismo táctico, que también llevará a cabo Sagulpa y que es el más rápido.


La Zona de Bajas Emisiones de Las Alcaravaneras comprende una superficie de 62.170 m2, unos 4.000 habitantes –de las 13.574 que residen en el barrio en total– y 127 locales comerciales (de los cuales se encuentran abiertos 70). En el entorno hay dos colegios, 4.171 plazas de aparcamiento –de las cuales, 1.021 en superficie– y 3 centros de atracción –el Mercado Central, el Parque del Estadio Insular y la playa de Las Alcaravaneras–.

 
Se trata de una zona bien conectada con los servicios públicos de transporte, ya que cuenta en sus inmediaciones con cuatro estaciones de Sítycleta, tres paradas de taxi y otras seis de Guaguas Municipales, que cubren nueve líneas de la red. “Precisamente, se trata de dotar a la ciudadanía de alternativas para desplazarse desde y hasta este entorno”, resaltó el concejal.

 
La ZBE incluye las calles Valencia, Alemania y Bilbao –de norte a sur– y Víctor Hugo, Blasco Ibáñez, Italia y Alfredo Calderón –de este a oeste–, dentro del perímetro que forman las vías Pío XII, Pi y Margall, Luis Antúnez e Ingeniero Salinas –por las que continuará circulando el tráfico con normalidad–.

 
El proyecto contempla la creación de 4 puntos de acceso a la Zona de Bajas Emisiones –dos por la calle Luis Antúnez, uno haciendo esquina con Víctor Hugo y el otro por la esquina con Italia; otro por la calle Ingeniero Salinas esquina Valencia; y otro por Pío XII esquina Blasco Ibáñez–, previéndose además varios circuitos de movimiento de tráfico en el interior del espacio y cambiando el sentido de circulación de ciertos tramos para evitar el tránsito de paso y residual por estas vías.

 
Por otro lado, se contempla una actuación especial de urbanismo táctico en las calles Alemania y Bilbao, especialmente en la primera –más larga–, donde se busca dar continuidad peatonal en el epicentro del barrio y se crea un eje norte-sur de preferencia para las personas que se desplacen a pie enlazando al norte con los corredores Galicia y Mesa y López y al sur con el barrio de Ciudad Jardín.
 

“El objetivo”, señaló Ramírez, “es que la ZBE favorezca los modos blandos de desplazamiento, y especialmente un tránsito peatonal seguro, cómodo y accesible para toda la ciudadanía”. Así, además de instalar señalización horizontal y vertical en ambas calles (Alemania y Bilbao) y elementos visuales en la calzada, se quitarán los bolardos de las aceras y se instalará mobiliario urbano como bancos y jardineras.

 
Además, todo el entorno de la Zona de Bajas Emisiones es ya ‘Zona 30’, es decir, que se prioriza en sus vías la circulación de ciclistas y peatones, algo que se potenciará con la reducción del tráfico rodado en este espacio. En los alrededores hay diversos tramos de la red ciclista de Las Palmas de Gran Canaria, con la que los usuarios de este medio de transporte podrán conectar fácilmente.

 
Vehículos autorizados para acceder a la ZBE

El control de acceso a la Zona de Bajas Emisiones se realizará a través de sistemas de vigilancia y cámaras de reconocimiento de matrículas. Estos sistemas registran las matrículas de los vehículos que ingresan a la zona y verifican si cumplen con los requisitos establecidos. En caso de incumplimiento, se aplican las sanciones correspondientes. Las excepciones serán tramitadas de forma sencilla mediante una aplicación y página web.

 
Podrán acceder, circular y estacionar libremente en la Zona de Bajas Emisiones todos los vehículos con categoría 0 EMISIONES o ECO de clasificación ambiental y cualquier vehículo no motorizado o con sistemas de propulsión eléctricos, como bicicletas, ciclos y VMP. 

 
Además, estarán exentos de la prohibición de acceso, circulación y estacionamiento sin necesidad de autorización municipal registral: vehículos registrados de las personas empadronadas en la ZBE; vehículos destinados al traslado de personas titulares de tarjeta de estacionamiento para PMR; vehículos de los servicios públicos esenciales y básicos; vehículos históricos; vehículos que presten servicios de urgencias sobre suministro de agua, gas, electricidad o telecomunicaciones; vehículos de transporte público de viajeros; y grúas para el remolque de vehículos y vehículos taller y auxilio en carretera, si el percance se produce en el interior de la ZBE o el vehículo se desplaza a un taller o aparcamiento en la zona.

 
Por último, los vehículos que podrán acceder, circular y estacionar con autorización municipal registral serán los siguientes: vehículos con distintivo que accedan para dejar o recoger alumnos con discapacidad y/o movilidad reducida previa autorización expresa del centro; vehículos indicados por las empresas y autónomos cuya actividad se ejerza en un local u oficina dentro de la ZBE; vehículos que presten servicios o entreguen o recojan suministros en el área; vehículos indicados por propietarios o arrendatarios de plazas de garanjes particulares; vehículos que accedan a los talleres de reparación dentro de la ZBE; vehículos que accedan a farmacias de guardia o apertura 24 horas; vehículos de seguridad privada; vehículos para actos en la vía pública; vehículos de transporte discrecional y regular de uso especial; vehículos que accedan a consultas, tratamientos médicos y centros veterinarios cuyas necesidades de movilidad lo exijan; vehículos de servicios funerarios; y vehículos que accedan para estacionar en un aparcamiento de uso público situado en el interior de la ZBE.

 
En cumplimiento de la normativa estatal, Las Palmas de Gran Canaria debe contar, en su condición de ciudad con más de 50.000 habitantes, con una Zona de Bajas Emisiones, es decir, un área concreta y continua del municipio en la que el acceso a determinados vehículos está restringido debido a sus emisiones, con medidas dirigidas a mejorar la calidad del aire, reducir la contaminación, proteger la salud y cuidar el medio ambiente.

 
El objetivo de la Concejalía de Movilidad del Ayuntamiento capitalino, en el marco de la Estrategia de Movilidad Sostenible de Las Palmas de Gran Canaria 2023 – 2026 es crear como mínimo otra Zona de Bajas Emisiones en la ciudad para este horizonte temporal.

 
‘Las Alcaravaneras cambia de aires’

Con el objetivo de concienciar e informar a la población capitalina sobre el proyecto y los objetivos de la Zona de Bajas Emisiones, la Concejalía de Movilidad, a través de Sagulpa, ha creado la campaña ‘Las Palmas de Gran Canaria cambia de aires’, haciendo alusión a la necesidad de transformar nuestros barrios en espacios más amables, donde hacer vida sea más cómodo, saludable y accesible para todos los vecinos y vecinas.

 
Esta nueva imagen será la que se utilice para los elementos visuales de la propia Zona de Bajas Emisiones y la podremos encontrar también en mobiliario urbano repartido a lo largo de la urbe, con el fin de servir como símbolo de los espacios urbanos recuperados para el uso y disfrute de la ciudadanía.