
por Europa Press
El portavoz de Sanidad del Grupo Parlamentario Socialista, Miguel Ángel Pérez del Pino, exigió este pasado viernes la dimisión del director del Servicio Canario de la Salud (SCS), Carlos Díaz, por ausentarse por tercera vez en la comisión parlamentaria de la Cámara regional a petición de los socialistas para dar cuenta del proceso de estabilización del personal sanitario, y ha calificado esta ausencia de "inadmisible e inaceptable".
"Los altos cargos de cualquier gobierno democrático tienen la obligación de rendir cuentas a sus parlamentos, y el de Canarias no tiene que ser menos", ha indicado.
Según Del Pino, "es juez y parte, toma decisiones de los procesos al mismo tiempo que se presenta como aspirante en superioridad de condiciones con respecto al resto de candidatos, haciendo uso de su cargo".
El Grupo Socialista abandonó la comisión como señal de protesta política ante los continuos desprecios del director del SCS y de la consejera a la labor de control y oposición de este Parlamento.
"¿Acaso cree que su cargo es un feudo personal, por encima del control democrático? ¿Qué tiene que esconder? ¿A qué le teme?", se ha preguntado en una nota remitida a los medios de comunicación.
Para Pérez del Pino, uno de los principales altos cargos de este Gobierno, "con el blindaje de la consejera, no hace más que mostrar su desprecio a esta Cámara, y a los diputados y diputadas que la conformamos".
Desde el Grupo Socialista consideran que Canarias merece una sanidad gestionada con transparencia y con respeto a las instituciones.
"Más de 12.000 plazas esperando a ser estabilizadas mientras el responsable de este proceso, solo está pensando en sí mismo", ha indicado.
En su opinión, "este señor no está a la altura, es un viceconsejero que huye de ser preguntado, que busca constantes excusas para no acudir a su requerimiento de comparecencia en esta Cámara, que literalmente se esconde".
Por ello, el diputado socialista entiende que "no puede permanecer ni un minuto más en su cargo, si no está capacitado para el ejercicio de su cargo, en todo su amplio sentido, y eso incluye dar la cara ante esta Cámara legislativa cuando así se le requiera, debe dimitir de manera inmediata".
Para Pérez del Pino, "si no tiene la decencia de dar la cara, si no respeta las instituciones democráticas, si desprecia a la ciudadanía que paga su sueldo, que de un paso al lado, exigimos su inmediata dimisión ante su constante negativa a comparecer ante esta Cámara, y si no tiene la dignidad de renunciar, que el presidente del Gobierno de Canarias lo destituya".