
por Politican
El Cabildo de Tenerife, a través de un convenio con el Gobierno de Canarias, invertirá 2,5 millones de euros en el proyecto de impermeabilización de la balsa El Saltadero, en el municipio de Granadilla.
El consejero de Sector Primario, Valentín González, explica que “en el Consejo de Gobierno de mañana (miércoles 9) aprobaremos la dotación de crédito para cristalizar este acuerdo, por el que acometeremos, por una parte, las obras de reimpermeabilización de la pantalla de impermeabiización, y por otra, la retirada de la actual cubierta y la ejecución de una nueva cubierta de la balsa”.
La balsa de El Saltadero está destinada, junto a la balsa de San Lorenzo (de 250.000 metros cúbicos) a la regulación del sistema de aguas regeneradas de Valle San Lorenzo, teniendo una función imprescindible: suministrar, en el periodo estival, los caudales necesarios para el riego de las más de 700 hectáreas de cultivo, fundamentalmente de platanera.
El Saltadero forma parte del sistema de distribución de agua de riego de aguas regeneradas y sirve a una masa importante de superficie cultivada, siendo esencial su función como infraestructura de regulación.
Sobre esta cuestión se pronunció el vicepresidente del Cabildo, Lope Afonso, que resaltó que “en el contexto de crisis agroclimática en el que nos encontramos, desde el Cabildo, y más concretamente desde el área de Sector Primario y BALTEN, trabajamos con una planificación basada en la mejora de las infraestructuras hidráulicas, tanto de almacenamiento como de distribución, para garantizar el agua de riego al campo tinerfeño”.
Tanto Lope Afonso como Valentín González incidieron en que “la importancia que le damos a esta hoja de ruta se constata en el hecho de que en el presupuesto de 2025 dedicamos al primer eslabón de la cadena productiva partidas por valor de 38 millones de euros”.
En Tenerife, casi el 73% del agua disponible es subterránea, el 20% procede de la desalación, y el resto, de la regeneración, o es agua en superficie. El 50% del total tiene como finalidad el consumo doméstico, turístico o industrial, mientras que el 47% se destina a uso agrícola.