María Fernández espera que el apoyo de CC a la reprobación de Torres no afecte a las relaciones con el Estado porque eso sería "un escándalo de magnitudes épicas"

María Fernández, directora general de Transportes del Gobierno de Canarias, aseguró en el programa "A Buenas Horas con José Luis Martín" que las conexiones interinsulares durante la Semana Santa no presentarán problemas. La directora destacó el buen estado de las conexiones marítimas y aéreas, aunque mencionó la vigilancia ante un posible aviso de huelga en Madrid y afirmó que se han hecho gestiones para priorizar el tráfico con las Islas.

Fernández señaló que están atentos a los posibles efectos de la huelga, especialmente en días de mayor tránsito, como el miércoles, y aclaró que Canarias cuenta con una protección especial debido a su dependencia de las conexiones aéreas, pudiendo decretar un 80% de servicios mínimos en caso de huelga en el archipiélago.

Respecto a las carreteras, indicó que aunque no hay un éxodo masivo de vehículos durante la Semana Santa, existe un flujo significativo por lo que recomendó precaución y mantener la distancia de seguridad, especialmente en momentos de mal tiempo.

En cuanto a las reuniones con AENA y el Ministerio de Transportes, Fernández expresó satisfacción por la disposición al diálogo donde se abordaron temas como la escalada de precios aéreos, la falta de información sobre proyectos piloto y las huelgas de controladores aéreos. A su vez la directora destacó la importancia de la transparencia en los precios de los vuelos y la conectividad y se mostró crítica con la privatización de las torres de control aéreo, subrayando la necesidad de garantizar la seguridad y los derechos laborales.

Precisamente sobre el observatorio de precios, María Fernández afirmó que nace de la necesidad de transparentar las tarifas aéreas y proteger los derechos de los canarios y explicó que aunque esta iniciativa no tiene carácter vinculante, busca dar luz sobre la conectividad.

Otro aspecto de la entrevista giró en torno a la reprobación del ministro Ángel Víctor Torres por parte de Coalición Canaria y si esto podría plantear desafíos adicionales en las relaciones entre Canarias y el Estado español. Como representante del Gobierno de Canarias, María Fernández probablemente reconoció la importancia de mantener una relación estable y constructiva con el Gobierno central para abordar las necesidades y desafíos de la comunidad canaria y deseó que la reprobación de Torres no afecte a las relaciones con el Estado porque eso sería "un escándalo de magnitudes épicas".

Si bien María Fernández dijo que podría compartir algunas preocupaciones o desacuerdos con la gestión del ministro Torres o con ciertas políticas del Gobierno central, es probable que también reconozca la importancia de mantener un diálogo abierto y colaborativo. Desde su posición, entendería que cualquier tensión en las relaciones entre Canarias y el Estado español podría afectar la capacidad de la región para lograr sus objetivos y satisfacer las necesidades de sus ciudadanos, especialmente en áreas críticas como el transporte, por lo que pidió un enfoque pragmático y centrado en los intereses de Canarias, instando a ambas partes a superar las diferencias políticas y trabajar juntas en beneficio de la comunidad canaria. 

Finalmente, también Fernández abordó el tema de las infraestructuras ferroviarias en las islas, defendiendo su importancia para la movilidad sostenible. Y aunque reconoció que las obras pueden tener sobrecostes, destacó el potencial de acceder a tecnologías innovadoras como el tren de hidrógeno para abaratar los costos en un futuro.

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