
por Politican
El Cabildo de Tenerife aprobó la pasada semana una inversión de 2.023.000 euros para impulsar tres proyectos clave del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER) que conectan directamente con el bienestar de la ciudadanía. La vigilancia volcánica y atmosférica, el análisis masivo de datos genómicos y el desarrollo de asistentes de inteligencia artificial para optimizar la administración pública conforman una apuesta integral por la ciencia y la innovación como herramientas útiles al servicio de la sociedad. Esta inversión forma parte del Plan Director de Innovación del Cabildo y responde al compromiso de anticiparse a los grandes retos científicos, medioambientales y tecnológicos del presente y del futuro.
Seguridad volcánica
Con una partida de 857.000 euros, el Cabildo refuerza uno de los sistemas de vigilancia volcánica más avanzados de Europa, operativo en Tenerife desde 1997 gracias al trabajo de los científicos del Involcan y del ITER. Este sistema permite detectar a tiempo señales de actividad volcánica, anticiparse a posibles erupciones y activar mecanismos de respuesta rápida, reforzando la seguridad de toda la isla.
Además, se amplía el control sobre la calidad del aire, mediante estaciones que miden en tiempo real la presencia de gases contaminantes. Esta información es clave para proteger la salud de las personas y actuar frente al cambio climático con decisiones basadas en datos precisos.
Más investigación genética
Otra parte importante de la inversión —1.090.000 euros— se destinará a fortalecer el laboratorio del ITER que estudia el ADN, el “manual de instrucciones” que tienen todos los seres vivos. Este laboratorio permite investigar enfermedades, desarrollar tratamientos más precisos, proteger especies en peligro o mejorar cultivos, y forma parte de una apuesta clara por convertir a Tenerife en un referente en ciencia, biotecnología y supercomputación.
Esta infraestructura también tiene un papel clave en la formación de jóvenes científicos y en la creación de una economía del conocimiento más fuerte y diversificada, conectada con las necesidades reales de la sociedad.
Mejorar los servicios públicos
El tercer proyecto, ATLAS, contará con 85.000 euros y tiene como objetivo probar cómo la inteligencia artificial puede ayudar a hacer más fáciles, rápidos y eficientes los trámites administrativos. Esta herramienta, aún en fase piloto, será capaz de redactar de forma automática documentos como los pliegos para licitaciones públicas, reduciendo el papeleo, ahorrando tiempo y facilitando la gestión dentro del sector público.